Punción Seca
La punción seca es una técnica terapéutica que utiliza el estímulo mecánico de una aguja como agente físico para tratar el síndrome de dolor miofascial (SDM).
Se denomina “seca” porque no se inyecta ningún agente químico, diferenciándola de otros procedimientos invasivos en los que se administran sustancias como anestésicos locales, agua estéril, suero salino, antiinflamatorios o toxina botulínica (Mayoral-del Moral, O., 2009).
Se denomina “seca” porque no se inyecta ningún agente químico, diferenciándola de otros procedimientos invasivos en los que se administran sustancias como anestésicos locales, agua estéril, suero salino, antiinflamatorios o toxina botulínica (Mayoral-del Moral, O., 2009).
Norma local
- En pacientes hospitalizados, el procedimiento debe contar con autorización del médico tratante registrada en la ficha clínica.
- En pacientes ambulatorios, también se requiere indicación médica.
- Se aplicarán todas las medidas de prevención de infecciones asociadas a la atención de salud (IAAS) y técnica aséptica, según el Protocolo de precauciones estándar y mecanismo de transmisión GCL 3.3.
- Se protegerá en todo momento la intimidad y seguridad del paciente.
- El procedimiento será realizado únicamente por kinesiólogos capacitados y autorizados por el/la Coordinador(a) de Kinesiología.
Indicaciones
Se recomienda en pacientes en proceso de rehabilitación, sin alteraciones cognitivas-comunicativas severas, y que presenten disfunción miofascial, como por ejemplo:
- Contracturas musculares
- Desgarros
- Tendinitis
Tipos de Técnicas de Punción Seca
- Punción superficial: Técnica en la que la aguja queda en los tejidos suprayacentes al punto gatillo miofascial (PGM) (Mayoral-del Moral. O, 2009), recomendada cuando se realiza la punción en un usuario que presente bajo umbral al dolor. Se ingresa con la aguja en la zona evaluada a una distancia no mayor de 1 cm, posteriormente no se debe manipular la aguja, y ésta debe quedar en la zona por un tiempo promedio entre 5 a 10 minutos.
- Punción profunda: Técnica en la cual se introduce la aguja, y ésta atraviesa el PGM (Mayoral-del Moral. O, 2009), se utiliza para producir el alivio del dolor y de las contracturas en los músculos. Se ingresa con la aguja en la zona evaluada hasta llegar a la banda tensa del músculo.
Posteriormente se debe manipular la aguja con la técnica de "entrada y salida", para buscar la respuesta de espasmo local (REL), que indicaría que se está realizando el procedimiento en la banda tensa que se encuentra en la contractura muscular.